Al finalizar el año, múltiples tendencias para las empresas en 2024 han sido compartidas. Uno de los aspectos generales en común es el impacto del uso de la tecnología en las estrategias de los negocios, ya que sin lugar a duda las previsiones están impulsadas en gran medida por las tendencias tecnológicas.
Hoy las empresas se enfrentan al cambiante y dinámico panorama del mercado, lo cual aumenta a su vez la complejidad de las necesidades de las operaciones de TI. Lograr adoptar las tendencias de forma estratégica, ágil y coherente con las necesidades y los presupuestos empresariales es un acto que requiere planeación y equilibrio; tener una visión holística de todas las operaciones y necesidades del negocio es indispensable para potenciar la innovación de manera equilibrada.
¿Pero, cuál es la hoja de ruta para lograr implementar las tendencias de manera estratégica y alcanzar el máximo retorno de inversión? Comparto las seis acciones prácticas que desde Kyndryl hemos evidenciado en el análisis de nuestras tendencias y las del mercado:
Adoptar FinOps (operaciones financieras) para aprovechar al máximo las inversiones en la nube: A medida quemás organizaciones confían en entornos de TI híbridos y multinube, los departamentos financieros a menudo tienen dificultades para monitorear y administrar las operaciones de extremo a extremo. Sin visibilidad y precios variables, los costos de la nube pueden ser difíciles de controlar. En 2024, FinOps cambiará las reglas del juego para las empresas que adopten esta metodología y práctica, alineando los equipos financieros, técnicos y comerciales para que puedan optimizar las inversiones en la nube.
Recurrir al edge computing para implementar la IA en las operaciones de la empresa: Las empresas manufactureras anticipan cada vez más el uso de la IA de forma individual y única para las fábricas, incluidas aquellas que realizan las mismas operaciones básicas, pero en diferentes ubicaciones. Al recopilar datos altamente localizados (costo de energía, condiciones ambientales, costos laborales, etc.), la IA ayudará a las empresas a ejecutar mejor sus operaciones para reducir los costos comerciales y prevenir problemas antes de que ocurran.
Implementar programas sólidos de gobernanza de datos: Para 2024, la calidad de los datos estará directamente correlacionada con la calidad de la IA. Pocas empresas en la economía global están preparadas y están recurriendo a socios para que les ayuden a prepararse. Las empresas tendrán que ir más allá de las soluciones individuales, sino que tendrán que aplicar la IA generativa a través de diferentes fuentes de datos a través de una plataforma de datos modernizada. Es importante tener datos bien organizados para que la IA se ejecute. Es como si estuvieras en un tren bala: más vale que tengas las vías correctas para mantener esa velocidad.
Poner mayor foco en las experiencias de los profesionales y clientes: Las empresas comenzarán a centrarse cada vez más en la experiencia y el factor humano. Cada vez más líderes tecnológicos buscarán conectar TI con los procesos de recursos humanos que afectan la capacidad de un colaborador para ser productivo. A medida que las empresas aumenten su propia agilidad de consumo digital y sus procesos comerciales, también remodelarán la forma en que trabajan los profesionales. La experiencia que tiene un colaborador a menudo se convierte en un modelo para la experiencia que crea para el cliente.
Priorizar la evolución de las habilidades en tecnologías para la modernización: Las empresas priorizarán las asociaciones en torno a la gestión y modernización del mainframe debido a la resiliencia de estas plataformas y las brechas de habilidades en este espacio. A medida que las empresas adoptan nuevas tecnologías, deben asegurarse de que sus herramientas funcionen en conjunto con sus herramientas existentes y no en silos. Por ejemplo, la necesidad de conectar la IA a una aplicación de mainframe, lo que a su vez requiere un conocimiento profundo y la capacidad de navegar por lenguajes de programación como COBOL y Java.
Estas acciones prácticas evidencian la necesidad de integrar de forma eficiente el progreso y decisiones tecnológicas con las necesidades más importantes de la empresa, así como incorporar una plataforma abierta como eje central para gestionar las operaciones de TI, que cada vez son más complejas. Asimismo, es clave que las empresas cuenten con una estrategia clara para su modernización empresarial a largo plazo.