Según una encuesta realizada por Woman in CEO Perú, solo el 12% de mujeres ocupa cargos directivos en el país.
En el marco de un entorno global cada vez más inclusivo y consciente de la igualdad de género, el sector de la construcción se encuentra frente a una cuestión de gran relevancia: ¿Cuáles son los retos y oportunidades que enfrentan las mujeres que buscan desempeñar roles ejecutivos y de liderazgo en esta industria?
Históricamente dominado por una mayoría masculina, el sector de la construcción ha estado experimentando un cambio significativo en los últimos años en términos de diversidad y equidad de género. Las mujeres han ido ganando terreno en diversas áreas de la industria, desde arquitectura y diseño hasta ingeniería y gestión de proyectos.
Vanesa Larco, gerente general de Sika Perú, explica que el desarrollo en la industria de la construcción no ha sido diferente al de los otros sectores. “Existe un precedente antiguo de que no hay oportunidades en la construcción para las mujeres; sin embargo, la brecha de género se ha ido cerrando en este y en todos los sectores de la economía. Con una línea de carrera importante y ganas de alcanzar los puestos más altos de las compañías, las mujeres pueden llegar a sus metas”, precisa.
Sin embargo, aún persisten desafíos significativos que deben ser abordados para garantizar una representación más equitativa en los altos cargos del sector:
- Oportunidades de crecimiento: A pesar de tener habilidades y calificaciones similares a sus colegas masculinos, las mujeres a menudo enfrentan una brecha salarial significativa en puestos ejecutivos. En tal sentido, Larco indica que, hoy en día, las empresas han reforzado sus programas de contratación y de crecimiento de línea de carrera para que las mujeres no tengan distinciones con sus compañeros varones.
- Estereotipos y percepciones culturales: Los estereotipos de género arraigados pueden limitar la percepción de las capacidades de liderazgo de las mujeres en la industria de la construcción. Es fundamental fomentar una cultura empresarial que valore y promueva la diversidad de género en todos los niveles de la organización. Por ello, desde el sector construcción, se trabaja la uniformidad de sus trabajadores, con el objetivo de que no existan distinciones de género.
No todo son desafíos
La inclusión de mujeres en altos cargos dentro del sector de la construcción trae consigo una variedad de perspectivas y enfoques en la toma de decisiones, lo que puede impulsar la innovación y mejorar la resolución de problemas. Las empresas que promueven la igualdad de género y la diversidad en sus equipos ejecutivos tienden a ganar una mejor reputación y una imagen corporativa más positiva, lo que puede atraer a talentos diversos y clientes comprometidos con estos valores.
Además, estudios han demostrado que las empresas con una mayor representación de mujeres en posiciones de liderazgo tienden a ser más rentables y eficientes, lo que puede resultar en un impacto positivo en la industria de la construcción en su conjunto.
En última instancia, es responsabilidad de las empresas, las instituciones educativas y la sociedad trabajar en conjunto para eliminar las barreras que enfrentan las mujeres en este sector y garantizar una mayor representación en los altos cargos. La equidad de género es fundamental para construir una industria sólida, innovadora y sostenible.
Vanesa Larco recomienda a las mujeres de la industria ser proactivas y alzar la mano para hacerse un lugar en los puestos más altos de sus compañías. “Las oportunidades para las mujeres están ahí, solo hace falta confianza y un buen desempeño para obtenerlas”, afirma.