Llevar cursos en línea, programas de formación continua o pertenecer a grupos de estudios locales permiten impulsar la empleabilidad de este segmento y reinsertarse al mundo laboral.
En un mundo en constante evolución, el interés por adquirir nuevos conocimientos y habilidades aumenta sin importar la edad. En el Perú urbano, aproximadamente 6.5 millones de personas son mayores de 50 años, lo que representa el 19% de la población. De este grupo, 4.9 millones de personas se encuentran en el rango de 50 a 70 años, abarcando el 76% de la población urbana en dicho grupo de edad, según el estudio de Ipsos Perú sobre Estadística Poblacional 2022. Este panorama ha motivado a diversas instituciones tanto públicas como privadas a ofrecer programas de formación diseñados para atender a este segmento de la población.
Marite Duarte, consultora especialista en Longevidad y Economía Plateada, señala que “en la actualidad, desde la perspectiva de la longevidad, la práctica del aprendizaje continuo a lo largo de la vida es esencial, ya que fomenta la evolución constante, la reinvención y la colaboración”. En este contexto es necesario brindarle a la Generación Plateada programas que les permitan impulsar su formación continua, mantenerse actualizados en el mercado laboral y lograr independencia económica.
Existen diversas razones por las cuales esta población elige estudiar, ya sea para actualizar o adquirir conocimientos, avanzar en sus carreras profesionales, cambiar de sector, reinsertarse al mercado laboral, obtener mejores oportunidades o generar un emprendimiento, entre otras.
En ese sentido, la especialista da a conocer tres maneras en las que las personas mayores de 50 años pueden seguir impulsando su aprendizaje:
- Cursos en línea: Internet ha transformado la educación, permitiendo el acceso a una amplia gama de cursos online y plataformas educativas. La Fundación Romero en alianza con el MTPE y el BID a través de su programa Becas Generación Plateada, ofrece cursos gratuitos impartidos a través del Campus Romero para fortalecer las habilidades y competencias laborales de los adultos mayores.
- Programas de educación continua: En el país, algunas universidades ofrecen este tipo de programas, diseñados específicamente para aquellos adultos mayores que desean seguir aprendiendo. Por ejemplo, la oferta del programa Emprende 50+ de la Universidad del Pacífico es una posibilidad para aquellas personas que pertenecen a la economía plateada.
- Grupos de estudio locales: En búsqueda de fortalecer los programas pedagógicos para cumplir con las expectativas de aprendizaje de los adultos mayores, instituciones como el Minedu brinda cursos en centros de educación en diversas localidades donde esperan fomentar la educación inclusiva de esta generación y promover su empleabilidad.
La actividad mental y el entrenamiento de la memoria ayudan a mantener las capacidades cognitivas, mejorar las funciones cerebrales y mantener una actitud positiva. Por lo tanto, el aprendizaje continuo no solo agrega valor personal, sino que también mejora la calidad de vida y la perspectiva de las personas mayores de 50 años.
“Independientemente de la opción que uno elija, la búsqueda de conocimiento es gratificante y enriquecedora en cualquier etapa de la vida. No existe una edad específica para el aprendizaje, ya que cada día nos brinda la posibilidad de explorar, descubrir y cultivar nuevos conocimientos para construir el futuro que deseamos”, concluye la especialista.