El Índice de Flujo Vehicular, que mide el tránsito de vehículos livianos y pesados por los puntos de peaje en todo el Perú, tuvo un nuevo avance en el último mes del 2022, cerrando el año con resultados positivos, informó la Asociación Automotriz del Perú (AAP).
Según cifras del INEI, precisó la AAP, el mencionado indicador registró una expansión de 2.9% en diciembre del año pasado respecto a similar mes del 2021. “Este resultado es consecuencia del aumento del tránsito de vehículos ligeros en 5.8%, aunque fue parcialmente afectado por el descenso del movimiento de vehículos pesados en -0.7%. En tanto, durante todo el año, el flujo vehicular nacional cerró con un incremento de 5.5% a tasa anual”, detalló.
Para la AAP, el cambio en el movimiento de vehículos en el 2022 respondió -sobre todo- al aumento del flujo de vehículos livianos en 9%, gracias al mayor desplazamiento de personas por el regreso a las actividades educativas y laborales de manera presencial, la reactivación del sector otros servicios y por las festividades de Navidad y Año Nuevo, asociado a la mayor concurrencia de consumidores a los centros comerciales, restaurantes y ferias gastronómicas, y visitas a los diversos atractivos turísticos. No obstante, en diciembre el desempeño fue impactado por el aumento de los conflictos sociales, que provocó el cierre de carreteras en diversos puntos del país.
En el caso de vehículos pesados, resaltó, en el 2022 el flujo vehicular creció 1.4%, impulsado por la mayor demanda por servicios de transporte en actividades como minería, comercio, construcción, entre otros. Sin embargo, esta mejora fue afectada, hacia la baja, por las diversas manifestaciones sociales que impidieron el normal tránsito en muchas carreteras, principalmente en el sur del Perú. Por otra parte, el flujo vehicular inició el 2023 con irregularidad debido a los continuos bloqueos de carreteras provocados por la conflictividad social, por lo que se espera que, el índice de movimiento vehicular de los primeros meses de este año se verá afectado. “Si bien a la fecha, el número de vías bloqueadas se ha reducido, el problema aún no ha sido resuelto, especialmente en el sur, que es donde se concentran en mayor medida las manifestaciones. Se suma el deterioro de las condiciones económicas, tanto a nivel interno como externo, mismas que desacelerarían la demanda interna y por ende golpearía el flujo vehicular. En ese sentido, resulta vital que las autoridades tomen las medidas que sean necesarias para alcanzar un punto de inflexión, en donde las posiciones entre el Gobierno y las demandas sociales se puedan acercar, y al mismo tiempo se tomen las acciones que sean necesarias para incentivar el crecimiento de la inversión privada, pilar importante detrás del desarrollo económico del país”, finalizó el gremio automotor.