La experiencia final del cliente se mantiene como el principal objetivo de las cadenas de suministro, quienes deben reforzar sus procesos con tecnologías que aceleren cada una de sus actividades.
Gracias a la aceleración de la transformación digital en el país, ha sido posible que las compañías consideren la implementación de nuevas tecnologías para la aceleración e innovación en sus procesos de negocio. La automatización hoy es un pilar fundamental tanto para los centros de distribución como para las tiendas minoristas, ya que seguir renovando es vital.
La automatización de las compañías como la conocíamos hace algunos años cambió, hoy en día ha escalado hacia una tecnología más innovadora, certera y colaborativa como la robótica. Y si bien su implementación ha sido lenta, en los últimos cinco años se evidencia una consolidación y se espera que sea el futuro de la logística en los próximos.
“Hay una diferencia entre automatización y robótica, y se basa principalmente en que esta última permite una mayor flexibilidad y escalabilidad para las necesidades actuales y de corto plazo. Al mismo tiempo, su funcionamiento se diseña acorde al crecimiento y evolución real de las empresas, lo que facilita una rápida adaptación”, explica Ignacio Orellana, Founder & Director at Sistemo.
Si bien el mercado se enfrenta a incertidumbres no solo por la economía local y global, sino también por los constantes cambios de consumo y políticas del país, la adopción de la robótica va al alza y se ha convertido en un fenómeno global.
“Desde el punto de vista del riesgo, es difícil para las compañías comprometerse a inversiones rígidas y estáticas que intenten cubrir necesidades con proyección a mediano o largo plazo, ya que el mercado y el entorno es muy cambiante. Es así como la robótica les permite mantener los márgenes e índices de crecimiento desde el punto de vista de los costos, brinda nuevos servicios a sus clientes y resguarda su posición en el mercado”, asegura Ulrich Reiser, country manager de STG Perú.
Al mismo tiempo, la robótica busca cubrir tareas estandarizadas y repetitivas que requieren mucho tiempo. Por ende, al momento de implementarla, las empresas pueden evidenciar inmediatamente sus beneficios como una aplicación de costos efectiva, mayor información con analítica mejorada para la toma de decisiones, realizar tareas exactas y evitar el error humano, derivando así, en un aumento de la satisfacción del cliente.
Beneficios y crecimiento a gran escala
Esta tecnología, lejos de reemplazar a las personas, transforma el trabajo de los colaboradores a procesos más ágiles, dinámicos y económicos, generando un mejor ambiente de trabajo. Sobre todo, hoy, donde se evidencia una escasez de personal por diversos factores, ya sea por la ubicación geográfica de las bodegas o el tipo de tareas a desarrollar.
“Somos testigos de una alta rotación de personas en la industria, por lo que el simple entrenamiento es clave para agilizar los procesos. La robotización permite realizar estas capacitaciones en corto plazo, de manera mucho más simple e intuitiva. De esta manera, las compañías aseguran la continuidad operacional”, comenta Reiser.
Además de una buena capacitación, la clave de esta tecnología no son solo los robots, sino también el software que utilizan las compañías, y para ello el sistema de gestión de almacenes (WMS) será clave.
Para que este tipo de soluciones tengan éxito, las compañías deben buscar la asesoría de especialistas que diseñen el espacio en que trabajarán los robots, los procesos que realizarán, los softwares que lo apoyarán y acondicionar el almacén para que sea totalmente automatizado. Además, se necesitan buenos robots, red Wi-Fi y accesorios.
“Lo fundamental para alcanzar el éxito, es contar con un partner que identifique y acompañe cada una de las fases para avanzar en un proyecto de automatización. Para comenzar, las compañías deben analizar el desarrollo de su negocio, luego el partner se encarga de diseñar la solución adecuada, instalarla, realizar la puesta en marcha y por supuesto, ocuparse del soporte y mantención para finalmente analizar la producción y medir su eficiencia”, indica Reiser.
La tecnología juega un papel vital para el aumento de la productividad de las empresas, la mejora de sus procesos productivos, la reducción de costos y llegar a sus clientes de forma más eficiente y rápida. Por ello, la automatización marcará la pauta de la industria para ofrecer experiencias memorables.
“La robótica complementará los procesos. Por más inteligencia artificial que apliquen las compañías, siempre se requiere de mano de obra y los conocimientos del ser humano. Sin duda potenciará exponencialmente el trabajo de los colaboradores dentro de los centros de distribución mientras los robots funcionan 24/7 para realizar tareas repetitivas”, concluye Orellana.