En los últimos tiempos, hemos sido testigos de un preocupante modus operandi en el proceso de licitación de obras hospitalarias en el Perú. Este patrón de comportamiento, que ha sido denunciado en casos específicos como el hospital de Calca, Cusco, y el hospital María Reiche de Marcona, Ica, involucra a la empresa china Sinohydro Corporation Limited y plantea serias interrogantes sobre la transparencia y la ética en las contrataciones públicas.
El proceso comienza con la presentación de ofertas por parte de distintas empresas interesadas en la construcción de hospitales. Sin embargo, lo que deberífede sandaler 2017 coole mannen ringen Belgium jaqueta de couro com capuz hoffen univerzalne knizkove puzdro na mobil hängevitrine landhaus amazon levis 609 jeans finch fischerhut cheap jerseys personalized nfl jersey juventus pink black jersey adidas forest hills originals sim ho su router wifi best wigs zelt mieten dresden guess laukku Finlanda ser un proceso justo y transparente se convierte en una sucesión de postergaciones y plazos largos para la evaluación de las ofertas, con el objetivo de eliminar a los demás postores y favorecer a Sinohydro.
Uno de los métodos utilizados es la revisión exhaustiva y minuciosa de cada detalle de las ofertas, incluso llegando a buscar errores gramaticales en la documentación. Esto incluye la revisión letra por letra de los más de 10 mil ítems que conforman el expediente técnico del hospital, desde las partidas del presupuesto hasta las ofertas económicas presentadas. Si bien la revisión detallada es una práctica necesaria para garantizar la calidad de las propuestas, en este caso parece ser utilizada como un pretexto para descalificar a los competidores.
Es importante destacar que esta estrategia se aleja de la evaluación de fondo y se enfoca en asuntos de forma, como errores de tipeo o discrepancias en el desglose de partidas. Esto plantea la pregunta de si la misión de los miembros del comité de licitación es realmente encontrar errores legítimos o si están buscando cualquier pretexto para descalificar a las empresas competidoras.
La normativa del Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE) es clara en cuanto a que los errores de tipeo en el desagregado de partidas no deben ser causa para eliminar a un postor en un contrato a suma alzada. Sin embargo, parece que esta práctica se ha utilizado para eliminar a empresas en el pasado, lo que pone en entredicho la integridad del proceso de licitación.
Un aspecto alarmante de esta situación es la presunta participación de exfuncionarios en el proceso de otorgamiento de la buena pro a favor de Sinohydro. Estas denuncias apuntan a la influencia indebida de estos exfuncionarios en los comités de selección, lo que plantea interrogantes sobre la independencia y la imparcialidad de los procesos de licitación.
Un caso emblemático es el del hospital de Calca, donde el Consorcio Salud Calca, liderado por Sinohydro, ganó la buena pro a pesar de las denuncias sobre irregularidades en el proceso. Además, se han señalado problemas financieros en una de las empresas del consorcio, 2H ingeniería y construcción, lo que agrega más preocupaciones sobre la capacidad y solvencia de los contratistas.
Otra cuestión relevante es la firma de contratos con empresas bajo investigación por supuestos actos de corrupción en otros países, como es el caso de Sinohydro en Ecuador. La adjudicación de contratos a empresas con antecedentes cuestionables plantea dudas sobre la debida diligencia en la selección de contratistas.
Finalmente, cabe mencionar la figura de Eloy Durán Cervantes, cuyo papel en la gestión de EsSalud ha sido objeto de controversia. Su supuesta participación en nombramientos irregulares y su presunto retorno a la institución como gerente de Proyectos de Inversión para asegurar contratos con Sinohydro levantan interrogantes sobre su conducta y su relación con la empresa china.
En resumen, la situación planteada en el proceso de licitación de obras hospitalarias en el Perú, particularmente en relación con Sinohydro Corporation, es motivo de profunda preocupación. La necesidad de garantizar la transparencia, la imparcialidad y la ética en las contrataciones públicas es fundamental para el desarrollo del país. Las denuncias y los indicios de irregularidades deben ser investigados a fondo para restaurar la confianza en el sistema de licitaciones y asegurar que los recursos públicos se utilicen de manera adecuada en beneficio de la sociedad peruana.
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Foto: expreso
